¿El limón y la lima son venenosos para los perros?

La base de datos de plantas tóxicas para perros de la Sociedad Estadounidense para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (ASPCA, por sus siglas en inglés) incluye limón (citrus limonia) y lima (citrus aurantifolia). La dieta de alimentos crudos biológicamente aprobados (BARF), sin embargo, es una alternativa natural a la comida comercial para perros que apoya la alimentación de carne cruda, frutas y verduras, incluye toronjas y naranjas en su lista de alimentos Esto sugiere que mientras que algunos tipos de cítricos son tóxicos para los perros, otros no lo son.

Los limones y las limas contienen la sustancia psoralenos, un compuesto que también se encuentra en otras frutas y verduras como el apio, el perejil, los higos y las pastinacas. Se usa para tratar la psoriasis y otros trastornos de la piel. En combinación con la acidez de las frutas, los psoralenos pueden hacer que la ingestión de limones y limas sea peligrosa para los perros y otros animales. Sin embargo, los aceites extraídos de estas plantas son más tóxicos en formas concentradas que aparecen en insecticidas, salsas, champús y aerosoles.

Ambas frutas producirán los mismos síntomas en un perro. La gravedad dependerá de la fuerza de la sustancia, la cantidad y si el perro ingirió la sustancia o la absorbió a través de su piel. Un perro puede vomitar, sufrir diarrea, babear y temblar en exceso y mostrar signos de ataxia. También se puede desarrollar una erupción, particularmente en el área de la ingle del perro. Los efectos a largo plazo pueden incluir depresión e insuficiencia hepática, lo que resulta en la muerte del animal.

Para los perros que han consumido la fruta o el jugo de un limón o lima, los síntomas probablemente serán leves. Retenga los alimentos durante 24 horas y permita que el perro solo tome agua. Esto eliminará la fruta de su sistema. Esté atento a cualquier señal de que la intoxicación esté empeorando. Si el perro ha estado expuesto a aceites concentrados a través de su piel, lave al animal con jabón líquido para platos y agua tibia hasta que el olor a cítricos y todos los rastros del aceite hayan desaparecido. Seque al perro y manténgalo caliente, observándolo cuidadosamente para detectar síntomas adicionales. Si el perro ha ingerido productos con una fuerte concentración de cítricos, llévelo al veterinario lo antes posible. El estómago del perro debe enjuagarse y se le dará un carbón finamente molido para unir las toxinas en el estómago y evitar que sean absorbidas por el sistema digestivo del perro.

Mantenga a su perro seguro evitando el acceso a productos químicos domésticos, insecticidas y productos como champús y aerosoles domésticos con fuertes concentraciones de limón y lima. Si sospecha que su perro podría estar sufriendo una intoxicación, comuníquese de inmediato con la línea directa de intoxicación animal de la ASPCA para recibir asesoramiento.