Cómo cuidar una caña Massangeana
Cosas que necesitarás
Agua destilada
Ropa suave
Alimentos de origen vegetal
Tijeras de plantas
Insecticida
Bastoncillos de algodón y alcohol
Propina
Use un medidor de suelo con una sonda para evaluar la humedad del suelo.
Cuidar una caña Massangeana
¿Quieres una planta de interior llamativa que necesite poco cuidado e incluso tolere el abandono? La caña massangeana, o planta de maíz, se ajusta a esa descripción. Las hojas de la planta son su mejor característica: verde brillante con una franja amarilla. Además, tolera poca luz y humedad y no necesita, ni quiere, mucha irrigación.
Paso 1
Coloque su bastón massangeana en luz solar indirecta y brillante para un crecimiento óptimo. Los bastones masivos tolerarán poca luz, pero crecerán muy lentamente.
Paso 2
En climas cálidos o con poca humedad, rocíe la planta diariamente. Espolvorea las hojas con agua y un paño suave según sea necesario.
Paso 3
Agua con agua destilada. El flúor, las sales y el cloro en el agua del grifo pueden dañar las hojas y raíces de la planta.
Paso 4
Riegue no más de una vez por semana, ya que el riego excesivo puede pudrir las raíces de la planta.
Paso 5
Reduzca el nuevo crecimiento ocasionalmente para permitir que la caña massangeana crezca una nueva cima.
Paso 6
Alimente su caña en masa con un alimento para plantas comercial aproximadamente una vez al mes en clima cálido.
Paso 7
Revise su caña massangeana periódicamente para detectar ácaros, insectos harinosos o escamas. Trate cualquier infestación con un insecticida en aerosol. Para insectos y escamas harinosas, también puede limpiar la planta con un bastoncillo de algodón empapado en alcohol.
Paso 8
Esté atento a estos otros signos de problemas: bordes marrones en las hojas (exceso de riego), manchas chamuscadas (demasiado sol), manchas de color marrón grisáceo (hongos causados por demasiada humedad) y hojas caídas o tallos (sobre o bajo riego).